Pink Saris, el ejército de los saris rosa. FUENTE: http://www.global1.youth-leader.org/2012/05/gulabi-gang-ladies-in-pink-fighting-in-pursuit-of-justice-in-rural-india/
A lo largo del tiempo han ido surgiendo muchos tipos de organizaciones feministas y muchas son también las maneras de abordar las temáticas de los géneros, los sexos y de las sexualidades. Margot Pujal (2005), en un pequeño libro donde clarifica brevemente algunos de estos aspectos, discrimina entre el feminismo como movimiento, de los feminismos como teoría. En el primer caso, se trata de un movimiento, mayoritariamente de mujeres, que desde el S. XVIII, lucha de forma activa a favor de la transformación social. La libertad y la emancipación estuvieron los estandartes de lucha de los primeros feminismos, donde teoría y vindicación van a una.
Manifestación sufragista en Londres (Palacio de Buckingham), 1914. FUENTE: http://www.vintag.es/2015/02/suffragettes-vs-police-vintage-photos.html
Como sea que las mujeres fueron excluidas del sistema liberal de “libertades” desde un buen principio, el feminismo liberal nació como la otra cara del liberalismo, configurando y desafiando los límites de su espacio constitutivo. El principal objetivo de sus propuestas era conseguir la igualdad formal. Las mujeres feministas aspiraban a tener los mismos derechos legales que los hombres y, posteriormente, a la independencia económica para lograr la autonomía y la libertad, conceptos que habían sido definidos por el pensamiento ilustrado y que, en un primer momento, estas feministas adoptan.
Laura Mañá. Clara Campoamor. La mujer olvidada (TV) (2011). FUENTE:http://www.distintofilms.com/esp/tv/proyectos-producidos/item/root/clara-campoamor-la-mujer-olvidada-
Ahora bien, muy pronto se dieron cuenta que la división de dos esferas compartimentadas (privada y pública) -que aparentemente limitaba el poder del Estado- en realidad las relegaba a un espacio donde los derechos y las ventajas de la ciudadanía no tenían cabida. Y inventaron el conocido eslogan “lo que es personal es político”, al que tiempo después le añadirían “lo que es político es personal”. De este modo, exigiendo unas libertades que les eran negadas y conciliando las tareas productivas y reproductivas (Silvia Federici[1], 2013), crearon nuevos espacios de libertad.
Ximena Zamosa 1998. Todo lugar se convierte en hogar. FUENTE : http://www.artistasplasticoschilenos.cl/658/w3-article-40506.html
La habitación propia que reclamaba Virginia Woolf[2] se va configurando con nuevas prácticas de libertad compartida.
Esta lucha de emancipación tiene un carácter reivindicativo que no cuestiona la identidad femenina; acepta las diferencias de género como “naturales”, sin darse cuenta de su relevancia política. De hecho, la identidad no se empieza a formular como problema hasta la aparición de El segundo sexo de Simone de Beauvoir[3], donde la autora explica que no se nace mujer sino que se llega a serlo .
Sara Morante, 2012. Casa de muñecas. FUENTE: http://saramorante.com
Su lúcida y detallada explicación de la situación en que se encontraban las mujeres en aquellos momentos -muchas de las cosas que evidencia son todavía hoy vigentes- está basada en los conceptos de alteridad y de trascendencia existencialistas. Ahora bien, si por Sartre la libertad es un estado subjetivo interno, De Beauvoir sostiene que ser libre es poder hacer. Así pues, esta autora abre una nueva mirada sobre este tema que dará lugar a diferentes debates. Sin embargo, algunas feministas han continuado reivindicando los ideales emancipatorios de la ilustración. Defienden que el feminismo, como conjunto coherente de vindicaciones, es un producto de la modernidad y piensan que la liberación de las mujeres solo es posible a partir del pensamiento ilustrado, el cual considera unos sujetos autónomos, responsables y críticos, capaces de ensanchar el espacio de la democracia por medio de las vindicaciones feministas (Celia Amorós, 2007). La aparición de otras ramas feministas y, en general, de todo el pensamiento posmoderno, cuestionan de manera radical este pensamiento liberal, derivando en otras maneras de pensar las identidades y la subjetivación, tal como después veremos.
Helena Cabello y Ana Carceller. Sujetos imprevistos, 2010. FUENTE: http://www.cabellocarceller.info/cast/
Esto afecta a la misma lucha feminista, hasta el punto que, si bien en un primer momento el movimiento feminista se había mantenido unido, posteriormente se multiplicaron los grupos, al mismo tiempo que se definieron estas líneas diferenciadas de pensamiento. A grandes rasgos, podríamos hablar de: las defensoras de un feminismo de la igualdad (liberal y socialista) que luchan por una serie de derechos y de medidas concretas -incluso desde el interior de los partidos políticos, de los mismos gobiernos o de las organizaciones internacionales-; las de un feminismo que enfoca el género como esencia biológica o ontológica; y las que priorizan las diferencias por encima de una identidad única de “mujer”. Así pues, hoy en día ya no se habla tanto de feminismo como de feminismos, diferentes opciones teóricas que se abren camino en un prolífero debate y que confluyen de nuevo ante luchas concretas.
Asimismo, en el contexto universitario, las investigaciones feministas enfocan nuevos temas de exploración y emprenden nuevas teorías (epistemología / metodología feminista). De esta manera se van ensanchando las áreas de los saberes. Sin embargo, hay que decir que en España los debates académicos y artísticos fundamentales de los feminismos contemporáneos nos llegan tarde y de manera restringida, hasta el punto de que en algunos lugares todavía no han acabado de llegar. Dado que en el postfranquismo todo estaba por hacer, se tuvo que empezar por las reivindicaciones más urgentes. Sin embargo, a partir de los años 90, las aportaciones teóricas de los feminismos de nuestro país han sido importantes y significativas.
Para más información sobre la historia de los movimientos feministas, ver Ana de Miguel[4] y, por un desarrollo más extenso de los nuevos feminismos, ver Silvia L. Gil[5], (2011).
Pussy Riot, 2015. FUENTE: https://cap.ucla.edu/blog/welcome-to-the-2015-2016-season/winter-olympics-pussy-riot-style/
[1] Para estudiar las relaciones entre el sistema económico, el trabajo productivo y la reproducción de la fuerza de trabajo, ver Silvia Federici 2013. Revolución en punto cero. Trabajo doméstico, reproducción y luchas feministas. Madrid: Traficantes de Sueños. http://www.traficantes.net/libros/revolucion-en-punto-cero
[2] Virginia Woolf: Una habitación propia. http://biblio3.url.edu.gt/Libros/wilde/habitacion.pdf
[3] Simone de Beauvoir. https://www.youtube.com/watch?v=cq9XdYPfZWc
4] Ana de Miguel estructura esta historia del movimiento feminista en cuatro capítulos: Cap1 -El feminismo premoderno. Cap.2 -El feminismo moderno. Cap.3 -Neofeminismo: los años sesenta y setenta. Cap.4 -El feminismo de la diferencia – Ultimas tendencias. http://www.mujeresenred.net/anademiguel.html.
[5] http://www.traficantes.net/libros/nuevos-feminismos-sentidos-comunes-en-la-dispersion
Referencias
Amorós, Celia (2007). La gran diferencia y sus pequeñas consecuencias… para las luchas de las mujeres. Madrid: Cátedra.
De Beauvoir, Simone (1949,1987). El segundo sexo. Buenos Aires: Ediciones Siglo Veinte.
De Miguel, Ana (1995). Feminisimos. A: Amorós, C. (dir.), 10 palabras clave en mujer (pp.217-225) Estella (Navarra): Verbo Divino.
De Miguel, Ana (1995). Los feminismos a través de la historia. Disponible en: http://www.nodo50.org/mujeresred/historia.htm
Federici, Silvia (2013). Revolución en punto cero. Trabajo doméstico, reproducción y luchas feministas. Madrid: Traficantes de Sueños. Disponible en: http://www.traficantes.net/libros/revolucion-en-punto-cero
Gil, Silvia L. (2011). Nuevos feminismos: Sentidos comunes en la dispersión. Madrid: Traficantes de Sueños. Disponible en: http://www.traficantes.net/libros/nuevos-feminismos-sentidos-comunes-en-la-dispersion
Pujal i Llombart, Margot (2005). El feminisme. Barcelona: Editorial UOC. Disponible en: https://books.google.es/books?id=I47wB2rMEL4C&printsec=frontcover&hl=es#v=onepage&q&f=false
Woolf, Virginia (1929,1980). Una habitación propia. Barcelona: Seix Barral. Disponible en: http://biblio3.url.edu.gt/Libros/wilde/habitacion.pdf